La precandidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton se desmarcó de la política para inmigrantes del Gobierno de Barack Obama, de quien fue secretaria de Estado entre 2009 y 2013.
Clinton consideró que Obama aplicó las leyes sobre deportaciones de manera agresiva como parte de una estrategia fallida para obtener el apoyo de congresistas republicanos a una reforma migratoria integral.
“Las leyes de deportaciones fueron interpretadas y aplicadas muy agresivamente durante los últimos seis años y medio. Creo que esa estrategia ya no es viable. Por lo tanto, tenemos que volver a aplicar las leyes de manera menos agresiva y estricta”, declaró Clinton a Telemundo.
Las deportaciones durante la gestión de Obama sumaban casi dos millones hasta que en noviembre de 2014 anunció medidas ejecutivas para proteger de la situación de casi cinco millones de inmigrantes sin documentos, luego de que los republicanos se nieguen a debatir un proyecto de reforma migratoria aprobado por el Senado.
“Yo no voy a separar familias. Y creo que esa es una de las diferencias”, subrayóClinton.