Un día como hoy, 21 de enero de 2008, falleció el Ing. Roberto Morales Morales -Exrector de la UNI e Hijo Ilustre de Huacho, provincia de Huaura, región Lima; pero ninguna institución pública huachana le ha preparado un homenaje póstumo a este gran ciudadano nacional.
Y eso que el busto del connotado huachano, esta a pocos metros de la municipalidad provincial de Huaura y a un costado de la catedral de Huacho, en el boulevard Saenz Peña de la sede del gobierno regional de Lima.
A continuación un artículo que le dedicó a los días de fallecido el Dr. Manuel Burga Díaz reconocido historiador y exrector de San Marcos. Homenaje.
Adiós, Rector Emprendedor El 21, hace apenas unos días, se produjo el sensible fallecimiento del ingeniero Roberto Morales Morales, rector de la UNI, elegido para el período 2004-2009. No puedo ocultar mi consternación y tristeza, ya que él encarnaba los sueños de muchos peruanos por hacer las cosas bien. Lo conocí el año 2001, cuando fui elegido rector de San Marcos y él era rector encargado de la UNI.
Nació en Huacho en 1942, y como provincianos de la misma generación, a pesar de que él era un destacado ingeniero civil y yo historiador, nunca hubo impedimento para iniciar el diálogo, la amistad y las acciones conjuntas. Lo fui descubriendo poco a poco. Muy pronto conocí a su hermano gemelo, Oswaldo, también profesor de la UNI, casi indiferenciables; lo acompañé una vez en sus innumerables visitas a su colegio, Nuestra Señora de la Merced, en Huacho, de donde había egresado como el primer alumno de su promoción, en 1959.
Así me acerqué a sus raíces, a su pueblo, su gente, sus amigos de juventud; su inocultable condición de hombre bueno. Los rectores, en las universidades públicas peruanas sobre todo, como muchas autoridades elegidas en nuestro país, somos como veleros de épocas pasadas, no dependemos de nuestros propios motores, sino de la calidad y dirección de los vientos. Roberto Morales no se resignó a esta situación, trató de construir su propia ruta. Viajó tantas veces pudo como rector para informarse de lo que sucedía fuera, en otras universidades de AL y del primer mundo, hasta que creó el proyecto insignia de su gestión, la “UNI, Universidad de Emprendedores”.
Lo describió en su breve ensayo “El nuevo rol de la universidad en el siglo XXI”, donde mostraba su comprensión de lo que significa la globalización, la era del conocimiento y la revolución de la información y las comunicaciones en la actualidad, lo que tradujo en su “Plan de Acción 2004-2009, Ciencia y Tecnología para un desarrollo equitativo y sostenible, mediante la excelencia académica y la acreditación”. No eran simples palabras, Roberto era un hombre de acción.
En el segundo semestre de 2001, cuando nos propusimos en San Marcos, contra viento y marea, pasar las oficinas de la Administración Central a la ciudad universitaria, una de las primeras cosas que hice fue conversar con él, pedirle que la empresa “Construcción Civil” de la UNI construya nuestra Sede Central Jorge Basadre. Con él pusimos la primera piedra, se trabajó sin cesar y logramos inaugurar el edificio el 12 de febrero de 2003, el mismo día en que se celebraba el centenario del nacimiento del Historiador de la República.
En marzo de 2002, firmamos públicamente, en el auditorio Rosa Alarco Larrabure de San Marcos, junto con Francisco Delgado de la Flor, rector de La Molina, la Alianza Estratégica entre las tres universidades. En setiembre de 2002, al celebrarse el IX aniversario de UNI PETRO, por su invitación, visité los campos de petróleo de esta empresa en Talara y, sorprendido, recorrí el lote 9 denominado ABC (Algarrobos, Barrancos y Cuestas) que tiene una extensión de 1,500 hectáreas y 104 pozos petroleros. Me impresionó UNI PETRO por la limpieza de sus instalaciones, sus exportaciones, sus actividades de docencia, investigación y gestión institucional.
Progresivamente comprendí mejor su compromiso y su consecuencia con los tiempos nuevos. A finales del año 2004, nos propuso, a los rectores de la Alianza Estratégica, hacer un convenio con ESAN para ofrecer un curso sobre emprendimiento para alumnos de los últimos ciclos de cualquier especialidad. Cada universidad debería aportar 40 estudiantes; yo dudé de encontrar 40 estudiantes “emprendedores” en San Marcos. Me equivoqué totalmente: en el verano de enero 2005, se presentaron 150 candidatos.
La Alianza Estratégica luego miró a las universidades vecinas, y así –por la decidida intervención de Benjamín Marticorena– se formó la Red Académica Peruana, RAAP, Internet dos, la autopista al futuro para la investigación y la docencia en las universidades de la Alianza y del Consorcio de las universidades privadas, PUCP-UPCH, UP y UL. Estas cosas, lógicamente, no podían pasar desapercibidas.
El año 2003, estudiantes radicales ganaron las elecciones en San Marcos, que pronto comenzaron a asediar al rectorado. Al año siguiente, el 2004, grupos similares ganaron en la UNI, que, al no poder impedir la elección del ingeniero Morales, pasaron a las acciones directas: muchos recordarán las imágenes en la TV del asalto al rectorado, los estudiantes enmascarados y las agresiones públicas.
En la ANR no nos equivocamos cuando impedimos la intervención de la UNI, y ahora recuerdo gratamente la manera valiente, abierta y rotunda como él defendió su proyecto de universidad, que afortunadamente triunfó.
No olvide la UNI este legado de consecuencia y compromiso. Por eso ahora puedo decir, ya sin la tristeza del inicio: adiós amigo, Rector Emprendedor.